Monumento a la Batalla

Nos encontramos en el centro de la plaza de la Virgen Blanca, como podéis observar, el centro de atención se lo lleva el monumento conmemorativo a la Batalla de Vitoria, que ocurrió el día 21 de junio de 1813. Enfrentó a Francia contra España, en el bando de España se encontraban Portugal y Reino Unido, además de unos pocos aliados alemanes. Napoleón engañó a los españoles diciendo que solo pasaría por España para ir de camino a Portugal.



Esta batalla ocurrió a escasos kilómetros de Vitoria cerca de lo que hoy conocemos como el polígono de Jundiz


Este monumento es obra del escultor valenciano Gabriel Borrás, y se inauguró el 4 de agosto de 1917.

 

Gabriel Borras fue elegido gracias a un concurso público, en el que los requisitos eran que debía conmemorarse la victoria de las tropas aliadas frente al ejército francés y plasmar la figura del héroe el General Álava, ya que, a él, le debemos todo el casco viejo que tenemos hoy en día. Esta obra fue elegida de entre 7 propuestas con el lema “Si vis pacem para bellum” que se podría traducir como: “Si quieres paz, prepárate para la guerra”.


Otras 6 propuestas presentadas


Sin lugar a duda Borrás, cumplió todas las exigencias descritas en las bases del concurso. 

 

Arquitectónicamente, construyó una estructura piramidal cuyos lados se proyectan hacia la plaza de la Virgen Blanca. Borras combinó los materiales habituales de la época que eran la piedra y el bronce. Utilizó una técnica realista, con la cual consiguió una narración descriptiva y minuciosa de los acontecimientos de la Batalla de Vitoria. 



Además, la maqueta presentada por Borrás llevaba consigo una memoria en la que se incluía la descripción del monumento. 

 

Como podéis observar, el monumento consta de 3 partes. 

 

En el primer piso podemos encontrar tallados en piedra los personajes que están más vinculados con la ciudad. En la cara sur, nos encontramos la figura principal del monumento ya que todas las demás se colocan en torno a esta, la figura del héroe General Álava montado a caballo cómo se había solicitado en las bases del concurso, tiene una actitud triunfanteanimando a sus paisanos a defender la ciudad.

 

También aparece el pueblo que se acerca con alegría aclamándolo. Las personas que aparecen son reales y van vestidas con las mismas ropas con las que aparecen en los cuadros del pintor Ignacio Díaz de Olano. En la escultura, podemos observar el escudo de la ciudad de Vitoria.



En la parte este podemos observar la otra cara de la moneda, la derrota, muestra la ayuda de los que fueron vencidos entre los que destacamos la imagen del Dios de la guerra en la mitología clásica, Marte, su figura recoge la destrucción sembrada. De su armadura sale José Bonaparte. Marte es el que le indica el camino para volver a su país. Al pie de esta cara podemos leer la fecha conmemorativa de la batalla. En la cara oeste vemos dos partes opuestas entre sí, a la derecha, nos encontramos con los triunfadores y, a la izquierda, con los derrotados heridos y desolados que vuelven a su país.  


 

En el segundo piso se encuentra la parte central del monumento que el escultor destinó a los vencedores. Aquí, nos encontramos a los generales en caballo, que representan a las fuerzas aliadas que tomaron parte activa en la batalla. Rodeando la parte central del monumento podemos encontrar 4 escudos de las naciones aliadas que están rodeados de ramos de laurel y roble que representan la victoria alcanzada gracias a la unión de dichas naciones.

 

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En la parte central, nos encontramos con la figura a caballo del duque de Wellington. La cara este corresponde al Ejército español que se encuentra en pleno ataque acompañado por el escudo.

 

En la cara norte, podemos observar las consecuencias de la guerra. Por último, en este piso quedan reflejados los húsares alemanes que acompañaron al general Álava para cerrar las puertas de la ciudad para evitar el saqueo tras una guerra de destrucción. 

 

Por último, este monumento es coronado por un grupo alegórico que representa el espíritu de la victoria. Podemos observar una figura femenina alada, la victoria, que muestra la bandera española en una mano mientras que, en la otra, agarra un ramo de olivo que simboliza el fin de la guerra y el comienzo de una nueva era de paz. También podemos encontrarnos un León qué está pisando un águila los cuales simbolizan al vencedor y el vencido.

 


Desde la implantación del monumento este ha generado diversas polémicas tanto por el lugar en el que se encuentra como por su estilo y temática. Además, ha sufrido ataques materiales y todo tipo de deterioros que no siempre han sido evitados por los responsables de la ciudad. 

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